Hoy os enseño el resultado de uno de mis momentos estoy-frustrada-y-necesito-cortar-algo. Normalmente, lo que corto es mi pelo, pero esta vez la víctima fue una camiseta a la que no le tenía mucho cariño: camiseta básica, barata, que con los años acabó estirada y con la costura retorcida. Estaba arrinconada en el armario, esperando acabar en el contenedor de la basura, así que no me iba a sentir mal si el resultado era un churro.
La largura de la camiseta (sobre la mitad del culete) me permitió hacerle flecos sin convertirla en una prenda demasiado corta. No tengo fotografías del paso a paso, porque lo hice de madrugada, pero los cortes que hice fueron básicamente estos: en horizontal para eliminar el dobladillo y en vertical para hacer los flecos.
No sé cuántos flecos hice, pero sí que sumaban un número par. Tomé dos y, dejando un espacio desde el inicio de los flecos, los uní atando un poco de hilo. Había probado antes anudándolos y también cosiéndolos, pero no me convencía ninguna de las dos posibilidades. Hice lo mismo con el resto de los flecos, de dos en dos, hasta acabar.
Si os fijáis en la fotos, para colmo la camiseta es de esas que tienen imán para el polvo y las pelusillas. Y no es porque sea de color negro, sino por el material.
El resultado no es una camiseta espectacular ni mucho menos, pero recordad que estaba destinada a un final trágico de todos modos y que el objetivo era sólo liberar mi frustración 🙂 Me habría gustado enseñaros la camiseta completa, pero soy malísima con las autofotos, así que os enseño sólo el detalle de los flecos, que al fin y al cabo es lo interesante.
Consejo para las que lo queráis intentar: después de probármela, me di cuenta de que me había quedado más larga en la parte trasera que en la parte delantera. El fallo está en que corté ambas caras de la camiseta a la misma altura. Así que si, como yo, tenéis bastante pecho tened en cuenta que la parte delantera siempre se «encoge» un poco. De todos modos, las diferentes alturas también pueden tener su gracia.
¿Vosotros también os dedicáis a cortar ropa de vez en cuando? ¿Os gustan los flecos? A mí me recuerdan mucho a una camiseta que tenía cuando era pequeña, en color azul verdoso, con muchos flecos muy finitos.
¡Pasad buen día!