Hace unos meses, María de Mery’s Notebook sorteó en su blog una Japan Candy Box y tuve la suerte de ser una de las ganadoras. Entre unas cosas y otras, he tardado lo mío en poder abrir la caja y probar el contenido, pero por fin os puedo hablar de ella.
Por si no lo sabéis, os cuento que Japan Candy Box es una cajita de suscripción mensual cargada de chuches japonesas. La que yo probé era la correspondiente al mes de septiembre e incluía las cositas que os enseño a continuación.
01. Coris Gum Gum Chewing Gum
De estos chicles no había ni rastro, así que supongo que olvidaron incluirlos.
02. Fujiya Anpanman Lollipop (5/5)
Un chupa de naranja que estaba super rico.
03. Hi-Chew Pineapple Chewy Candy (4/5)
Masticables de piña, tipo Sugus azules, pero con una textura más chiclosa.
04. Popin’ Cookin’ Oekaki Animal Candy Land DIY Kit (1/5)
Esto que parece tan divertido me dio bastante asquete. Es un kit para hacer gominolas que incluye masa, colorantes, moldes… e instrucciones en japonés. Supongo que no interpreté bien los dibujos y por eso no fui capaz de hacer nada de provecho, pero el caso es que lo de manosear comida me parece una guarrada. Mi recomendación es pasar de los colorantes, que tenían sabores afrutados muy artificiales, y comerse la masa tal cual viene en el paquetito, que tenía un sabor un poco más salvable.
05. Meiji Watapachi Melon Popping Candy Floss (3/5)
Una especie de algodón de azúcar con petazetas por el medio, ambas cosas con sabor a melón. No había visto nada parecido en mi vida, pero la verdad es que es divertido. No le doy más nota porque era muy ácido y yo soy más de sabores dulzones.
06. Bourbon Fettucine Cola Gummies (2/5)
Gominolas de cola. No soy fan de ese sabor, pero tampoco eran terribles. Lo que no me gustó nada fue el olor, tipo baño de estación de autobuses.
07. Meiji Apollo Strawberry Chocolates (4/5)
Chocolatitos con sabor a fresa. Estaban buenos, pero sin duda lo mejor era la cajita, ¡preciosa!
08. Poop Shaped Lollipop (4/5)
Piruleta de cola con forma de caca. Aunque os he dicho que no soy fan de ese sabor, esta me encantó porque me recordó a unas piruletas que había en los noventa, que tenían una parte normal y otra parte ácida, ¿os acordáis?
09. Morinaga Ramune Candy Soda Balls (3/5)
Pastillitas tipo Escalofrío. Tienen sabor a soda, de modo que en realidad no saben a nada en concreto, pero no están mal.
Si os digo la verdad, este tipo de cajas me parecía una chorrada, pero lo cierto es que ir probando comida sin saber muy bien lo que te estás metiendo en la boca es super divertido, ¡sobre todo si son chuches! No me veo suscribiéndome a esta caja, pero me apunto la idea de pillar una en algún momento puntual para abrirla con amigos.
¿Conocíais la Japan Candy Box? ¿Cuál de estos dulces japoneses os causa más curiosidad?