A finales de agosto pasé una semana en Granada, disfrutando de la ciudad y de mi primer viaje en solitario. Fue genial y volvería a repetir mil veces, tanto el destino elegido como eso de viajar sola. Además, tuve bastante suerte con el tiempo y no pasé tanto calor como temía.
Estuve allí una semana porque quería desconectar y tomarlo con calma, pero lo cierto es que se trata de una ciudad que se puede conocer en pocos días. Por eso he preparado un plan de lo que yo haría si volviese a ir, conociendo mejor las distancias y las características de cada barrio. Porque Granada no es grande, ¡pero en algunas zonas hay cuestas matadoras!
DÍA 1
Desde la Plaza Nueva echamos a caminar por la Carrera del Darro, siguiendo el río, hasta llegar al Paseo de los Tristes. Durante el camino y en sus cercanías podemos visitar unos cuantos museos y otros lugares de interés, como el Bañuelo o el Palacio de los Córdova. Si continuamos el camino hacia el Sacromonte, podemos visitar su Abadía y disfrutar de unas bonitas vistas de Sierra Nevada.
Volviendo sobre nuestros pasos, acabaremos llegando al barrio del Albayzín, en el que merece la pena perderse durante horas, callejeando entre sus casas blancas y sus aceras empedradas. Desde el Mirador de San Nicolás podemos disfrutar de unas vistas impresionantes de la Alhambra; está algo masificado, pero la verdad es que la imagen quita el hipo. Este mismo día podemos aprovechar para ir caminando hasta la Cartuja. El paseo no tiene mayor interés, pero el Monasterio es tremendo de bonito.
DÍA 2
Después de la primera toma de contacto con la ciudad, el segundo día me parece perfecto para visitar la Alhambra. Hay diferentes accesos, pero yo sólo conozco la Cuesta de Gomérez. Para mí, la parte más espectacular del complejo son los Palacios Nazaríes, pero hay muchas otras cosas que ver y la visita puede tomar más de tres horas.
Después del palizón de la Alhambra, podemos reponer fuerzas en Rosario Varela y volver a las proximidades del conjunto monumental, donde podemos visitar algún que otro lugar de interés. A continuación descansamos dando un paseo por el Barrio de la Magdalena, visitando tiendas bonitas como Lycka Store y Material Revolution.
DÍA 3
Por la mañana visitamos la Catedral de Granada, que se encuentra en la Plaza de las Pasiegas. Además, visitamos la Capilla Real y la Madraza; ambas se encuentran en un lateral de la catedral, pero son visitas independientes de la anterior. Podemos comer en Rollo, en la misma plaza.
Por la tarde nos perdemos por la Calderería y volvemos al centro para visitar tiendas chulas como Typographia, Discos Bora Bora y Oh Oh July. Tampoco podemos dejar de tomar algo en el Bohemia Jazz Café o el Lemon Rock.
¡Y hasta aquí mi sugerencia de visita exprés a Granada! Por supuesto, hay muchas otras cosas que ver y hacer en la ciudad, pero he querido mencionar únicamente las que más me han gustado.
¿Has estado en Granada? ¿Cuáles son tus imprescindibles? ¿Has viajado en solitario alguna vez?