No hace tanto que publiqué el último post de esta serie, pero mis rutinas han cambiado mucho desde entonces y me apetecía repetir. Ya sabéis que la aventura no es una constante en mi vida, pero me gusta registrar esas pequeñas cositas que configuran mi día a día.
Aproveché para hacerlo el viernes, que tuve el día libre y me dediqué, básicamente, a hacer recados y descansar.
8:00
A estas horas llevaba un buen rato despierta poniéndome al día con las redes sociales y disfrutando de la maravilla de que cada vez amanezca más tarde. No tengo persianas, sólo venecianas, y el sol que entra en verano me quema los ojos cada mañana. Ahora puedo dormir tranquila hasta las 8. ¡Que llegue ya el otoño, por favor!
9:00
Después me pasé al salón a leer un poco de Orlando, que me parece un libro para saborear a ratitos.
10:00
La alarma de las 10 me pilló fregando los platos, con todo el glamur. Sí, mancho muchos cacharros para hacer cualquier tontería, ya lo dice mi madre.
11:00
Me vestí con dos de las prendas que más uso: un vestido vintage que compré en Granada y unas zapatillas que ya dan pena pero son más cómodas que ninguna otra cosa en el mundo.
12:00
Aquí estaba en el bus camino del centro comercial. Necesitaba algunos básicos para casa —que finalmente no compré— y aproveché para pillar macetas, un ficus elastica precioso y alguna otra chorrada. Porque ya tengo una edad en la que disfruto más decorar la casa que ponerme guapa yo. ¿Os pasa?
13:00
Motivadísima con mi primera maceta y en busca de más. Por si os quedaba alguna duda: sí, ahora mismo tengo más macetas que plantas, pero no es problema porque las estoy reproduciendo y me van a hacer falta más pronto que tarde.
14:00
Me estuve planteando la posibilidad de ponerle un tutor a la monstera, pero de momento la voy a dejar crecer libre. Si veo que las ramas se vuelven muy locas, entonces lo pondré.
15:00
A por paños y pinzas iba yo… Sé que no me juzgáis porque vosotras hacéis lo mismo.
16:00
A esta hora estaba siendo feliz recolocando las plantas en el salón. Tengo que darle una vueltita a la disposición, porque no son muchas plantas pero la mayoría son grandes y mi salón es pequeño. Estoy esperando a que el ficus acabe de abrir para saber cuánto espacio va a ocupar exactamente.
17:00
Esta foto la perdí, no sé cómo. Era yo en el sofá merendando un platazo de frutos rojos con yogur de vainilla, muesli, sirope de agave y canela. Mi merienda favorita.
18:00
Siempre es buen momento para organizarse la vida un poquito. Ahora mismo tengo una agenda personal, una agenda para el blog y un diario de cinco años. En 2021 pretendo volver a hacer agenda imprimible, como las que hacía antes, y a ver si unifico un poco todo.
19:00
Estuve dos buenas horas tirada en cama intentando no derretirme. ¿En vuestras ciudades también ha hecho un calor espantoso las últimas semanas? Hoy llevo rebequita a ratos y me siento bendecida.
20:00
Aquí seguía, entre la vida y la muerte.
21:00
La alarma de las 9 me pilló a punto de meterme en la ducha. Es bastante gracioso el momento en el que suena y pienso «Uy, toca foto».
22:00
Por la noche respondí comentarios en el blog y solucioné un par de cosas relacionadas con el post de esa mañana.
23:00
Justo antes de dormir preparé un pedido de Strabismic Bird, porque me moría de sueño pero una es cumplidora y me gusta enviarlos cuanto antes.
Y ya no hay más fotos porque no llegué despierta a las 12. Me da mucha paz que la última foto sea en cama leyendo, pero así fueron las cosas y así se las hemos contado.
¿Qué hicisteis vosotras el viernes? ¿También os tomáis super en serio lo de ir de compras plantiles?