El miércoles os presenté mi nuevo proyectillo craft: un tráiler de 2015, mes a mes, montado a base de recortes, dibujos y otras técnicas que no domino en absoluto.
Ahora toca que os enseñe cómo he decorado el mes de enero. Pero hay trampa, señores, y es que la primera versión me había quedado tan horrorosa que decidí arrancar la hoja y su correspondiente mitad para rehacer la composición con un poco más de tino. He aprendido que, en esto del scrapbooking, es mejor esperar a tener clara la disposición de las piezas antes de pegar nada. Ahora el resultado se ve mucho mejor cuadrado, sin huecos ni apelotonamientos raros.
Como desde que empezó el año no me he separado de mi agenda, me pareció gracioso hacer una réplica en pequeñito y decorarla con algunos dibujos. Además, así quedan escondidos y no se ven a menos que se abra la mini agenda.
Por lo demás, una foto, algunos recortes, papeles estampados, un par de pegatinas, el comienzo de una canción… Ya veis que mi vida es muy tranquila y no tengo nada especial que reflejar en este álbum.
No sé si es algo muy utilizado en el scrapbooking, pero me he dado cuenta de que me encanta el efecto de la agendita, porque me recuerda a los libros infantiles que tienen las páginas llenas de sorpresas. Seguro que añadiré más cosas de este estilo a lo largo del año.
Bueno, ¿qué nota me ponéis como scrapbooker principiante? ¿Sigo intentándolo o mejor me retiro? 🙂